La energía cósmica que está dentro y alrededor de todas las cosas -Chi- es creada de muchas maneras. La naturaleza genera Chi todo el tiempo. El agua que fluye, forma un abundante suministro de energía SHENG CHI -por ello nos sentimos sosegados y calmados cuando vemos o escuchamos “correr” agua al lado de un estanque, rio o incluso del bravío mar-. La brisa suave -que nos apacigua y nos refresca- produce Chi positivo; por el contrario, los torrentes crujientes de agua así como los huracanes, vendavales o vientos borrascosos PODRIAN generar Chi negativo o SHAR CHI.
El Chi es esa fuerza invisible, orígen del movimiento y del crecimiento de TODO
Las acciones humanas -como he explicado en
otros posts- también son generadoras de Chi...
... Un experto violinista estimula positivamente nuestro cerebro cuando escuchamos la hermosa melodía que sale de la vibración de las cuerdas de su violín -a menos que sintamos "repulsión" hacia las melodias en violín y genere por lo tanto un efecto contario-. Un trabajador que culmina a tiempo y efectivamente sus labores, genera Chi positivo... un cheff que elabora su mejor receta deleitando el paladar de muchos, genera Chi positivo… un profesor dedicado que da una clase magistral a sus alumnos compartiéndo todos sus conocimientos, genera Chi positivo... es cuestión de actitud -NO de aptitud-.
... Un experto violinista estimula positivamente nuestro cerebro cuando escuchamos la hermosa melodía que sale de la vibración de las cuerdas de su violín -a menos que sintamos "repulsión" hacia las melodias en violín y genere por lo tanto un efecto contario-. Un trabajador que culmina a tiempo y efectivamente sus labores, genera Chi positivo... un cheff que elabora su mejor receta deleitando el paladar de muchos, genera Chi positivo… un profesor dedicado que da una clase magistral a sus alumnos compartiéndo todos sus conocimientos, genera Chi positivo... es cuestión de actitud -NO de aptitud-.
Un Chi saludable -Sheng Chi- es dinámico,
está en constante movimiento y fluye armoniosamente generando bienestar.
El exceso de Chi, de energía y movimiento -un terremoto, una inundación o como mencionamos in supra, un huracán- crean sentimientos de miedo, frustración, pesar; generan Shar Chi.
La falta de Chi, de flujo energético también es dañina, nos
estanca, nos roba el aliento, acaba con TODO lentamente.
El agua estancada, turbia o contaminada crea Shar Chi y sus consecuencias para las personas que están rodeadas de esta “mala energía” son la mala suerte con todas sus derivativas… ruina, desamor, mala salud…
Estimulando el Sheng Chi haremos que este permaneza en nosotros impulsándonos a transitar por el camino de la abundancia, prosperidad y felicidad!
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